LE PIDO A LA LUNA

Nunca tendré nada, mi miedo al rechazo se está alimentando de forma casi enfermiza, gracias a ti. Y ahora solo siento ese terrible miedo a la soledad, y es en soledad donde las lágrimas que guarde en mi interior con todas mis fuerzas, ahora hacen que sienta la sensación de que me estoy ahogando en ellas…

Esa esas son las sensaciones que estaba  intentando evitar con todas mis fuerza, las sensaciones con las que estaba luchando por no tener que enfrentarme a ellas cara a cara.

Y es que me encantaría ser fuerte, ser tan fuerte como a veces aparento ser…

Pero la verdad es distinta, la verdad es que mientras que por fuera aparento ser indestructible, por dentro me rompo en pedazos.

Destrozada por dentro y no sé cuánto tiempo podre aguantarlo…Cuanto tiempo podre conservar mi rostro implacable, con una falsa sonrisa, dibujada en el, que cada día se va apagando con más rapidez.

Mis miedos empiezan a atraparme en un callejón sin salida, y la soledad es lo único que parece reconfortarme a veces, aunque corra el riesgo de terminar con todo aquello que una vez fui…Tal vez esa sea la solución, enfrentarme a todo, arriesgarlo todo. 

A veces la respuesta que buscamos esta en aquellas palabras que no queremos oír y que tanto evitamos….Así que estoy preparada para oír esas palabras, estoy preparada para que termines de destrozarme.

Quiero oír de tu boca eso que ya sé, pero que nunca me atrevo a enfrentar, aunque me este matando el solo hecho de pensarlo…

-¡Dilo! 

“¡Di que nunca me querrás…Di que me odias!”

-Dilo y acaba con todo esto de una vez…