18/9/11

Algo en ti está mal, y lo peor es que lo sabes y no haces nada por evitarlo. Odias a los que te rodean, o tal vez a los que te rodearon, por culpa de ellos eres así ahora ¿no?. Ellos crearon el monstruo en el que te has convertido, ese que cree que para evitar el dolor, que para protegerse del dolor que te puedan causar, es mejor crear un campo de minas a tu alrededor, y obviamente, nunca dejar de lado esa mascara que te empeñas en llevar puesta todos los días. Das una imagen que si vieras desde fuera estoy segura que  hasta tú mismo detestarías, tal vez  ya lo hagas…o tal vez no, se te ve cómodo jugando en el papel de “carbón del año” que te has empeñado en interpretar. 

Y a pesar de que no dejas ni por asomo que nadie te conozco de verdad, yo sigo pensando que realmente todo esta apariencia que quieres dar, es pura fachada. Porque en el fondo lejos de ser fuerte como intentas aparentar, sabes que eres débil. Y que no encajas bien el dolor por eso prefieres ir por ahí creándoselo a los demás antes de que ellos te lo puedan crear a ti. Pero te diré algo, sea lo que sea lo que tortura tu mente, lo que te hizo tanto daño, una cosa es segura, y es que por mucho que te joda, y por más que bebas para intentar olvidarlo…
¡No te lo podrás quitar de la cabeza!.


Aun así, está bien, respeto tu actitud aunque ni creas por un momento que algún día podría llegar a entenderla, tú puedes seguir con esa filosofía de vida que te has montado, si es que consideras que así te irá bien la vida, es mas es posible que así sea, que te vaya bien. Pero en el caso de que todo se tuerza y te vaya mal, espero que no seas tan estúpido y soberbio como para no pedir ayuda.


(Tal vez cuando escribí este texto no podía decir al cien por cien lo mismo, pero ahora si…)


“Sin rencores…”

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